/ martes 2 de abril de 2019

Me haces falta

ME HACES FALTA

Me hacen falta tus caricias pautadas.

tus miradas disimuladas

tus labios tibios,

tu espalda escarpada,

el arrullo de tu aliento,

la calidez de tu cuerpo,

Me hacen falta para conciliar el sueño.

Y cuando carezco de tus brazos

Miro a mi alrededor, camino lento

Para que el tiempo no pase despacio...

Para que las horas se aceleren

y estes junto a mi, conmigo

Por qué me haces falta...

y aunque sin ti río, sueño y vivo

me haces falta como el agua al rio

En la penumbra busco tu torso,

en la madrugada anhelo tu rostro,

para que al abrir tus ojos,

sumergirme en sus cuencas profundas.

De tus respiraiones pausadas,

tomar tu aliento, como alimento,

tu desnudez abrasadora,

sea la luz de la aurora

Tu cuerpo mi refugio.

Me haces falta para que calmes mi sed,

la mitigues poco a poco con tus besos,

que sea tu voz la que me arrulle

Y a la vez me permita no conciliar el sueño.

Al acariciar con mis manos tu cabeza, tus cabellos,

calmes mi ansiedad y mis deseos.

Cuanto anhelo tu proximidad

tu ternura, tu cuerpo.

apoyarme en tus hombros

descansar mi cabeza en tu pecho,

escuchar tu corazón, con sus ritmos y sus ecos.

Me haces falta, como la sangre al cuerpo.

Ana Verónica Torres Licon

torres_anav@hotmail.com

ME HACES FALTA

Me hacen falta tus caricias pautadas.

tus miradas disimuladas

tus labios tibios,

tu espalda escarpada,

el arrullo de tu aliento,

la calidez de tu cuerpo,

Me hacen falta para conciliar el sueño.

Y cuando carezco de tus brazos

Miro a mi alrededor, camino lento

Para que el tiempo no pase despacio...

Para que las horas se aceleren

y estes junto a mi, conmigo

Por qué me haces falta...

y aunque sin ti río, sueño y vivo

me haces falta como el agua al rio

En la penumbra busco tu torso,

en la madrugada anhelo tu rostro,

para que al abrir tus ojos,

sumergirme en sus cuencas profundas.

De tus respiraiones pausadas,

tomar tu aliento, como alimento,

tu desnudez abrasadora,

sea la luz de la aurora

Tu cuerpo mi refugio.

Me haces falta para que calmes mi sed,

la mitigues poco a poco con tus besos,

que sea tu voz la que me arrulle

Y a la vez me permita no conciliar el sueño.

Al acariciar con mis manos tu cabeza, tus cabellos,

calmes mi ansiedad y mis deseos.

Cuanto anhelo tu proximidad

tu ternura, tu cuerpo.

apoyarme en tus hombros

descansar mi cabeza en tu pecho,

escuchar tu corazón, con sus ritmos y sus ecos.

Me haces falta, como la sangre al cuerpo.

Ana Verónica Torres Licon

torres_anav@hotmail.com