/ viernes 17 de abril de 2020

Lo que la crisis nos dejó II

Como se mencionó en la participación anterior, la crisis siempre deja una serie de reflexiones y muestra con claridad nuestros puntos débiles, pues por definición entramos en crisis cuando estamos dentro de una situación para la que no contamos con habilidades o conocimientos suficientes.

La crisis de salud por la que atravesamos hoy ha dejado ver con claridad la profunda ignorancia y deficiencia educativa del país. Ha quedado claro que la gente en lo general no tiene formación para entender, razonar y decidir sobre tópicos básicos en educación. Estamos lejos de la formación en ciencias y con ello, somos muy ignorantes de la biología, la física, la química, la sociología y/o la psicología.

Esto ha quedado patente, pues ante los temas que mundialmente se manejan las personas tienen una cantidad infinita de distorsiones, tales que el gobierno no ha logrado comunicar efectivamente el nivel o grado de peligro por el que atravesamos, como las acciones prudentes. Incluso hay personas que primero optan por explicaciones conspiracioncitas que por deducciones básicas en biología.

Tenemos todo tipo de circos e historias de heroísmo, frente a una situación donde lo único que requiere es evitar el contacto físico entre personas y el aislamiento prudente para evitar un alto índice de propagación. En parral por ejemplo el héroe del presidente fumigo toda la ciudad, aun y cuando no se tienen casos registrados, estos es acciones a un problema que geográficamente aún no existe.

Políticos peleándose por tener acciones que impresionen a sus futuros votantes, pero no por acatar aquellas acciones que sean de plena funcionalidad.

Pero esto solo es posible frente a un sistema educativo vencido, donde no se le enseña a la población en general a leer y pensar y donde pro su puesto no hay involucradas personas formadas en ciencias, para formar en ciencias.

La educación básica en México es muy carente, no hay formación cívica ni una comprensión del funcionamiento del gobierno y sus partes, lamentablemente en nuestro país la política se ve como un asunto de amigos y enemigos y no se cultiva el análisis de las acciones ni de los perfiles para el gobierno.

Ha quedado patente que nos urge un cambio de fondo en el sistema educativo, pero no solo en cuestiones administrativas, sino en cuestiones académicas. Si la educación en México no mejora, entonces seguirá siendo igualmente complicado la intervención en situaciones de este tipo, como en acciones de cualquier otro tipo.


Como se mencionó en la participación anterior, la crisis siempre deja una serie de reflexiones y muestra con claridad nuestros puntos débiles, pues por definición entramos en crisis cuando estamos dentro de una situación para la que no contamos con habilidades o conocimientos suficientes.

La crisis de salud por la que atravesamos hoy ha dejado ver con claridad la profunda ignorancia y deficiencia educativa del país. Ha quedado claro que la gente en lo general no tiene formación para entender, razonar y decidir sobre tópicos básicos en educación. Estamos lejos de la formación en ciencias y con ello, somos muy ignorantes de la biología, la física, la química, la sociología y/o la psicología.

Esto ha quedado patente, pues ante los temas que mundialmente se manejan las personas tienen una cantidad infinita de distorsiones, tales que el gobierno no ha logrado comunicar efectivamente el nivel o grado de peligro por el que atravesamos, como las acciones prudentes. Incluso hay personas que primero optan por explicaciones conspiracioncitas que por deducciones básicas en biología.

Tenemos todo tipo de circos e historias de heroísmo, frente a una situación donde lo único que requiere es evitar el contacto físico entre personas y el aislamiento prudente para evitar un alto índice de propagación. En parral por ejemplo el héroe del presidente fumigo toda la ciudad, aun y cuando no se tienen casos registrados, estos es acciones a un problema que geográficamente aún no existe.

Políticos peleándose por tener acciones que impresionen a sus futuros votantes, pero no por acatar aquellas acciones que sean de plena funcionalidad.

Pero esto solo es posible frente a un sistema educativo vencido, donde no se le enseña a la población en general a leer y pensar y donde pro su puesto no hay involucradas personas formadas en ciencias, para formar en ciencias.

La educación básica en México es muy carente, no hay formación cívica ni una comprensión del funcionamiento del gobierno y sus partes, lamentablemente en nuestro país la política se ve como un asunto de amigos y enemigos y no se cultiva el análisis de las acciones ni de los perfiles para el gobierno.

Ha quedado patente que nos urge un cambio de fondo en el sistema educativo, pero no solo en cuestiones administrativas, sino en cuestiones académicas. Si la educación en México no mejora, entonces seguirá siendo igualmente complicado la intervención en situaciones de este tipo, como en acciones de cualquier otro tipo.