¿Qué pasa cuando las cosas no salen como las esperamos?, algunos dicen: "Es que Dios tiene algo mejor preparado para ti", " Tal vez no era tu momento", "No era para ti".
¿Será cierto o es una simple justificación para no sentirnos tan mal?
El secreto está en ser honesto y posicionar tu situación en alguno de ellos, porque todo es parte de un plan perfecto; si llevas mucho tiempo haciendo lo mismo y sigues sin recibir lo que quieres, creo que alguien necesita hacer un cambio ¿no crees?, el gran problema es que muchos se resisten a hacer ajustes en su vida y de cualquier forma siguen sin obtener lo que desean. ¿Qué termina por pasar?, se frustran, suele pensar que los demás son los del problema, le echan la culpa a su mala suerte; existen ciertos eventos aislados en los cuales definitivamente no tenemos el control, pero existe también un libre albedrío en el que nosotros decidimos qué camino tomar.
¿Te hace reflexionar en algo? Aplícalo con todo lo que te sucede y sé honesto: ¿Hay algo que puedes modificar?, ¿Qué te falta para acercar eso que sientes tan lejos?, seguramente, si escarbas en tu interior, te toparás con la sorpresa de que existen algunos pensamientos, emociones, hábitos o decisiones que pudieran hacer la diferencia, “Todo sucede por una razón, ni antes ni después, las cosas ocurren cuando tienen que ocurrir”.
Hay momentos en nuestra vida en donde quisiéramos que las cosas fueran de una manera que realmente no son, todos hemos querido que por arte de magia el episodio gris que estamos viviendo sea transformado por un episodio lleno de colores gloriosos que reflejen nuestra felicidad ante dichas situaciones, pero hay que ser realistas, las cosas muchas veces no salen como nosotros queremos y es porque Dios que conoce el pasado, como lo presente, así como también el futuro sabe mejor que nosotros lo que es mejor para sus hijos y por eso las cosas no salen como quisiéramos.
Tú puedes tener planes que aparentemente sean muy bonitos, nadie te quita que quizá las intenciones de esos planes son sinceras, pero aun así no hay una seguridad que las cosas serán como tú quieres, todo en nuestra vida está relacionado con aprendizajes y vivencias.
Todo lo que nos ocurre es necesario para algo, para que aprendamos algo, para que experimentemos lo que nos ocurre, o simplemente para permitir que otras cosas mejores nos sucedan más adelante; pero debemos recordar que todo llega: tarde o temprano las cosas se aclararán y entonces podremos comprender cuál era la necesidad de que las cosas ocurrieran en el pasado como ocurrieron, reflexiona cuando las cosas no pasan como tú quieres y crees que todo se está cayendo a tu alrededor, en ocasiones sentirnos así nos lleva a la depresión y nos lleva a tomar decisiones incorrectas que nos atrapan y se convierten en una angustia que no se puede quitar; que bueno sería no pasar por esta etapa de la vida pero hay que entender que todos vamos a experimentar diferentes niveles de problemas en la vida y que durante este tiempo hay que recordar que no somos los únicos que estamos pasando por esto, hay muchas personas que quizás están pasando por lo mismo o ya lo pasaron y sobrevivieron; no te des por vencido, todo ocurre para nuestro bien, las cosas no están saliendo como querías, pero ten por seguro que cuando todo termine las cosas serán mejor de lo que un día te imaginaste que serían.
