/ lunes 3 de mayo de 2021

Intrigas | Mártires de madera

PROFESOR PUEBLINO: En el muro de honor del Congreso del Estado, para reconocer los movimientos sociales ocurridos en Chihuahua, está escrito con letras de oro: “Mártires de Madera 1965”, en honor a Arturo y Emilio Gámiz García, Pablo y Raúl Gómez Ramírez, Salomón y Salvador Gaytán, Oscar Sandoval Salinas, Miguel Quiñonez Pedroza, Antonio Scobell, Rafael Martínez Valdivia.

LUPITA: ¿Qué hicieron?

PROFESOR PUEBLINO: El 23 de septiembre de 1965, un grupo guerrillero y revolucionario, intentó tomar por asalto el cuartel militar del ejército mexicano de la ciudad de Madera, Chihuahua, reclamando sus derechos de igualdad, mejores condiciones de vida, trabajo para los campesinos, mayor distribución de la tierra y el empleo de militares para reprimir al pueblo.

PRIMITIVO: ¿¡Eran guerrilleros!?

PROFESOR PUEBLINO: En respuesta al rezago agrario y el enorme latifundismo ganadero, la acción de este grupo de revolucionarios no fue un acto de inconciencia, sino que fue el último recurso para enfrentar al Estado y a la burguesía latifundista, ganadera, minera y maderera del estado, por la vía de las armas.

SOLEDAD: ¿Quiénes fueron?

PROFESOR PUEBLINO: Ellos fueron: Arturo Gámiz García, profesor rural, de la Escuela Normal del estado, y principal dirigente; su hermano Emilio, estudiante; Óscar Sandoval Salinas, alumno de la Escuela Normal del estado; Pablo Gómez Ramírez, médico y maestro de la Escuela Normal Rural “Ricardo Flores Magón” de Saucillo; los profesores rurales Rafael Martínez Valdivia, del poblado de Basúchil, y Miguel Quiñones Pedroza, egresado de la Escuela Normal Rural "Abraham González" de Salaices, Chih.; Los campesinos Antonio Scobell y los hermanos Salvador y Salomón Gaytán, de Dolores, Madera.

MORAIMA: Maestros, estudiantes, campesinos.

PROFESOR PUEBLINO: El “Asalto al cuartel de Madera” es la primera acción insurreccional de envergadura de la guerrilla contemporánea en México. Se había planeado la participación de aproximadamente cuarenta personas, divididas en 3 grupos, pero solo uno de ellos entró en acción, de los otros dos, uno de avanzada, se retiró de la ciudad al no encontrar contactos y dar por hecho el desistimiento del ataque; y el otro, portador del armamento más potente, no pudo llegar a tiempo porque lo intransitable de los caminos y las crecidas de los ríos, se los impidió.

INDALECIO: Los dejaron solos…

PROFESOR PUEBLINO: Era aún la madrugada, cuando el grupo de 13 personas atacó el destacamento en el que se encontraban 125 soldados. Para responder al ataque, el primer movimiento de los soldados fue hacia las vías del tren que se encontraban unos metros enfrente del cuartel, en ese instante, el maquinista del tren (tras el cual se escondía una parte del grupo), encendió la luz del tren, que permitió a los soldados observar a los guerrilleros y ante ello empezaron a disparar. Los guerrilleros cometieron un fuerte error: detrás de ellos había una explanada de 2 km de largo antes de internarse en la Sierra, donde sería muy fácil matarlos. 8 murieron, 5 escaparon.

MANUELITO: Un acto fallido.

PROFESOR PUEBLINO: El gobernador Práxedes Giner Durán, que se había trasladado a Madera, ordenó que se abriera una fosa común y ahí se enterraran. "¿Querían tierra? ¿No? ¡échenles tierra hasta que se harten!"

TODOS: ¡Pobrecitos!

PROFESOR PUEBLINO: Los soldados recibieron sepultura con honores y funeral militar, y además fueron bendecidos por el cura de la ciudad, que se negó a hacer lo mismo con los cuerpos de los “criminales”.

PROFESOR PUEBLINO: En el muro de honor del Congreso del Estado, para reconocer los movimientos sociales ocurridos en Chihuahua, está escrito con letras de oro: “Mártires de Madera 1965”, en honor a Arturo y Emilio Gámiz García, Pablo y Raúl Gómez Ramírez, Salomón y Salvador Gaytán, Oscar Sandoval Salinas, Miguel Quiñonez Pedroza, Antonio Scobell, Rafael Martínez Valdivia.

LUPITA: ¿Qué hicieron?

PROFESOR PUEBLINO: El 23 de septiembre de 1965, un grupo guerrillero y revolucionario, intentó tomar por asalto el cuartel militar del ejército mexicano de la ciudad de Madera, Chihuahua, reclamando sus derechos de igualdad, mejores condiciones de vida, trabajo para los campesinos, mayor distribución de la tierra y el empleo de militares para reprimir al pueblo.

PRIMITIVO: ¿¡Eran guerrilleros!?

PROFESOR PUEBLINO: En respuesta al rezago agrario y el enorme latifundismo ganadero, la acción de este grupo de revolucionarios no fue un acto de inconciencia, sino que fue el último recurso para enfrentar al Estado y a la burguesía latifundista, ganadera, minera y maderera del estado, por la vía de las armas.

SOLEDAD: ¿Quiénes fueron?

PROFESOR PUEBLINO: Ellos fueron: Arturo Gámiz García, profesor rural, de la Escuela Normal del estado, y principal dirigente; su hermano Emilio, estudiante; Óscar Sandoval Salinas, alumno de la Escuela Normal del estado; Pablo Gómez Ramírez, médico y maestro de la Escuela Normal Rural “Ricardo Flores Magón” de Saucillo; los profesores rurales Rafael Martínez Valdivia, del poblado de Basúchil, y Miguel Quiñones Pedroza, egresado de la Escuela Normal Rural "Abraham González" de Salaices, Chih.; Los campesinos Antonio Scobell y los hermanos Salvador y Salomón Gaytán, de Dolores, Madera.

MORAIMA: Maestros, estudiantes, campesinos.

PROFESOR PUEBLINO: El “Asalto al cuartel de Madera” es la primera acción insurreccional de envergadura de la guerrilla contemporánea en México. Se había planeado la participación de aproximadamente cuarenta personas, divididas en 3 grupos, pero solo uno de ellos entró en acción, de los otros dos, uno de avanzada, se retiró de la ciudad al no encontrar contactos y dar por hecho el desistimiento del ataque; y el otro, portador del armamento más potente, no pudo llegar a tiempo porque lo intransitable de los caminos y las crecidas de los ríos, se los impidió.

INDALECIO: Los dejaron solos…

PROFESOR PUEBLINO: Era aún la madrugada, cuando el grupo de 13 personas atacó el destacamento en el que se encontraban 125 soldados. Para responder al ataque, el primer movimiento de los soldados fue hacia las vías del tren que se encontraban unos metros enfrente del cuartel, en ese instante, el maquinista del tren (tras el cual se escondía una parte del grupo), encendió la luz del tren, que permitió a los soldados observar a los guerrilleros y ante ello empezaron a disparar. Los guerrilleros cometieron un fuerte error: detrás de ellos había una explanada de 2 km de largo antes de internarse en la Sierra, donde sería muy fácil matarlos. 8 murieron, 5 escaparon.

MANUELITO: Un acto fallido.

PROFESOR PUEBLINO: El gobernador Práxedes Giner Durán, que se había trasladado a Madera, ordenó que se abriera una fosa común y ahí se enterraran. "¿Querían tierra? ¿No? ¡échenles tierra hasta que se harten!"

TODOS: ¡Pobrecitos!

PROFESOR PUEBLINO: Los soldados recibieron sepultura con honores y funeral militar, y además fueron bendecidos por el cura de la ciudad, que se negó a hacer lo mismo con los cuerpos de los “criminales”.