El imperialismo judaico representa el más grande poder global; es un pueblo de 17 millones de judíos dispersos por todo el planeta que se abrieron camino por medio de su poderoso sistema capitalista tras nacionalizado. Tienen un gigantesco poder económico planetario de corporaciones trasnacionales y bancos mas una abrumante mayoría accionaria en los sistemas económicos y productivos de los Países desarrollados y sub. En su haber se asienta el temible lobby sionista Neoyorkino que sostiene dos planes fundamentales: la especulación financiera informatizada con asiento en Wall Street y el complejo militar industrial de última generación de EEUU.
En todos los países del orbe hay hebreos directivos controlando y gerenciando los más grandes conglomerados económicos y políticos; administran tanto física como a control remoto casi todo el mundo entero. Son accionistas mayoritarios de las 30 multinacionales más grandes como Coca cola y de casi todos los bancos del mundo; son dueños de varios Trusts como Bayer, medios de comunicación como el New York Times, las revistas más influyentes como Newsweek, consorcios hegemónicos de internet como Yahoo y colosos del cine como Century Fox y Walt Disney entre mucho mas. Su objetivo central es el control y dominio pleno del planeta, sea por guerras, mentalismo, religiones, conquistas o sistemas democráticos y tienen como fin estratégico el imponer sus intereses geopolíticos, su agenda económica, militar, leyes de mercadeo y espiritualidad a modo.
Su maquinaria de concentración del capital mundial en mega grupos o mega compañías como el FMI; BM, OCDE u OTAN es la vía empleada para penetrar en el sistema administrativo de un País y así poder tomar su control. Esos amos invisibles consiguen lo que quieren en forma aplastante, manejan y controlan los países y sus gobernantes metiéndoles presión por todos lados tanto para financiarles dinero como para exigirles políticas públicas o pagos de adeudos; así los gobiernos ejecutan sus programas solo variando discursos, ya que promueven la agenda exigida como: división social, pérdida de identidad, promoción de antivalores, mentalidad anti católica y apátrida para poder convertir a las sociedades en masas moldeables a su conveniencia. Verbigracia, veamos el ejercicio del gobierno de AMLO-MALO, últimamente con la cartilla moral a través de pastores evangélicos a sueldo que próximamente tocarán nuestras puertas, promoviendo conceptos no católicos o anatemas.
Su economía les posibilita las decisiones planetarias de todo tipo y como si manejaran títeres de última generación mueven presidentes, ejércitos, policías, estructuras religiosas, económicas, productivas, tecnológicas, científicas, socioculturales, mediáticas, sistemas financieros, políticos y hasta los arsenales nucleares; así como los complejos y aparatos de despliegue militar en EE UU y de las potencias centrales como Gran Bretaña, Alemania, Francia y Japón entre las más relevantes. También crean lobos con piel de oveja o líderes revolucionarios santones, sembradores de desobediencia y anarquía; atrevidos habladores con ropaje científico para asombrar y atrapar incautos; sirven también para detectar a los verdaderos patriotas y defensores de Cristo.
Esta red reza en la catedral de Wall Street, en las Sinagogas de las organizaciones económicas, Bancos centrales y Reservas del dinero. A éste poder y no al estado de Israel es al que le temen los presidentes, políticos, periodistas e intelectuales. Tan poderoso imperio ha llegado a la madurez de sus tiempos y formaron una alianza tenebrosa con todo tipo de sociedades secretas y públicas anticatólicas para derribar el único orden mundial establecido por la Iglesia del hijo de Dios, su principal enemigo. El Vaticano de éstos poderosos es la ONU, así las cosas ¿Podrán derribar la fe y tradiciones de los 2300 millones de católicos existentes en el planeta ? La moneda está en el aire.
