/ miércoles 3 de junio de 2020

Homeostasis

El equilibrio de la vida

Los seres vivos para mantenerse saludables requieren mantener el equilibrio del medio interno de su cuerpo independientemente del externo. Células y órganos del cuerpo trabajan constantemente para mantener este equilibrio que trabaja en rangos muy estrechos, si sube o baja el cuerpo se enferma. El equilibrio decide entre vivir sano, enfermo o morir. Las células de nuestro cuerpo dictan la última sentencia sobre mantenernos saludables o no. Pero no por eso dejan de ser nuestras mejores compañeras y aliadas en el viaje de la vida. Por ejemplo, el cuerpo humano mantiene el pH de la sangre entre 7.35 y 7.45, aunque el metabolismo corporal constantemente genera numerosos productos ácidos de desecho que retan su capacidad para mantener el pH dentro de ese intervalo. Las consecuencias de no hacerlo son graves, ya que valores de pH menores a estos producen acidosis y valores superiores originan alcalosis, y cualquiera de ellos es peligroso para la vida. Es posible vivir pocas horas con un pH sanguíneo abajo de 7.0 o arriba de 7.7 pero un pH abajo de 6.8 o arriba de 8.0 es rápidamente fatal. Buena dieta equilibrada y ejercicio. La salud depende de la capacidad de nuestro cuerpo de mantenerse en el equilibrio que requieren nuestras células. La homeostasis es crítica para asegurar el funcionamiento adecuado del cuerpo, ya que si las condiciones internas no están reguladas o lo hacen de manera pobremente, el individuo puede sufrir grandes daños o incluso la muerte. Las células de un organismo sólo funcionan correctamente dentro de un intervalo estrecho de condiciones como temperatura, pH, concentraciones iónicas y accesibilidad a nutrientes, y deben sobrevivir en un medio en el que estos parámetros varían hora con hora y día con día. Los organismos requieren mecanismos que mantengan estable su medio interno intracelular a pesar de los cambios en el medio interno o externo, por lo que la homeostasis se ha convertido en uno de los conceptos más importantes en fisiología y medicina. Tenemos varios ejemplos donde podemos observar la homestasis, como cuando tenemos frio y empezamos a temblar para regular la temperatura. Cuando nos sube la presión sanguínea durante el ejercicio como respuesta del cuerpo al aumento en la demanda de oxígeno por los tejidos musculares. Cuando los músculos requieren más oxígeno, el cuerpo responde aumentando la presión arterial y por tanto el flujo sanguíneo a estos tejidos. Este aumento es necesario para cubrir la demanda de oxígeno por los músculos. El pulmón es un órgano altamente implicado en la homeostasis de nuestro cuerpo, afecta directamente en este equilibro si por ejemplo absorbe o libera mucho o poco dióxido de carbono. Si respiro mal y se me acumula mucho CO2 o si por el contrario tengo poco C2 igual me perjudica. Las células no pueden trabajar correctamente nuestro cuerpo no absorbe igual los nutrientes, nuestra respiración influye en cómo nuestro cuerpo absorbe las vitaminas y minerales que necesita nuestro cuerpo. Equilibrio. Respirar correctamente, dormir bien, contacto con la naturaleza, aire fresco y puro. En una forma similar, cuando una persona está hambrienta, el intervalo de referencia de la intensidad metabólica puede revalorarse abajo del normal. Esta baja en la intensidad metabólica es un intento del cuerpo por detener las lesiones debidas a la falta de alimentación y mantenerse funcionando a un nivel metabólico más bajo. Por ello, algunas personas que dejan de comer periódicamente en un intento por perder peso, encuentran que después de una baja inicial de peso se hace difícil perder más. Los problemas metabólicos del sobrepeso que se pueden solucionar con una dieta equilibrada, sin necesidad de tener hambre pero tampoco alimentarse en exceso y añadir ejercicio para cambiar ese pH acido que los provoca y regular nuestros niveles. El cuerpo se las arregla para sobrevivir. Pero para hacerlo de la mejor manera recordemos, dieta equilibrada, pensamientos equilibrados, respiración equilibrada, ejercicio equilibrado. Si mantenemos todo en equilibrio entonces podremos ir más allá de nuestra razón existencial cuando de manera equilibrada terminen los días de nuestra vida.

Para realizar ejercicio en su casa, puede solicitar informes en 627 1112423

El equilibrio de la vida

Los seres vivos para mantenerse saludables requieren mantener el equilibrio del medio interno de su cuerpo independientemente del externo. Células y órganos del cuerpo trabajan constantemente para mantener este equilibrio que trabaja en rangos muy estrechos, si sube o baja el cuerpo se enferma. El equilibrio decide entre vivir sano, enfermo o morir. Las células de nuestro cuerpo dictan la última sentencia sobre mantenernos saludables o no. Pero no por eso dejan de ser nuestras mejores compañeras y aliadas en el viaje de la vida. Por ejemplo, el cuerpo humano mantiene el pH de la sangre entre 7.35 y 7.45, aunque el metabolismo corporal constantemente genera numerosos productos ácidos de desecho que retan su capacidad para mantener el pH dentro de ese intervalo. Las consecuencias de no hacerlo son graves, ya que valores de pH menores a estos producen acidosis y valores superiores originan alcalosis, y cualquiera de ellos es peligroso para la vida. Es posible vivir pocas horas con un pH sanguíneo abajo de 7.0 o arriba de 7.7 pero un pH abajo de 6.8 o arriba de 8.0 es rápidamente fatal. Buena dieta equilibrada y ejercicio. La salud depende de la capacidad de nuestro cuerpo de mantenerse en el equilibrio que requieren nuestras células. La homeostasis es crítica para asegurar el funcionamiento adecuado del cuerpo, ya que si las condiciones internas no están reguladas o lo hacen de manera pobremente, el individuo puede sufrir grandes daños o incluso la muerte. Las células de un organismo sólo funcionan correctamente dentro de un intervalo estrecho de condiciones como temperatura, pH, concentraciones iónicas y accesibilidad a nutrientes, y deben sobrevivir en un medio en el que estos parámetros varían hora con hora y día con día. Los organismos requieren mecanismos que mantengan estable su medio interno intracelular a pesar de los cambios en el medio interno o externo, por lo que la homeostasis se ha convertido en uno de los conceptos más importantes en fisiología y medicina. Tenemos varios ejemplos donde podemos observar la homestasis, como cuando tenemos frio y empezamos a temblar para regular la temperatura. Cuando nos sube la presión sanguínea durante el ejercicio como respuesta del cuerpo al aumento en la demanda de oxígeno por los tejidos musculares. Cuando los músculos requieren más oxígeno, el cuerpo responde aumentando la presión arterial y por tanto el flujo sanguíneo a estos tejidos. Este aumento es necesario para cubrir la demanda de oxígeno por los músculos. El pulmón es un órgano altamente implicado en la homeostasis de nuestro cuerpo, afecta directamente en este equilibro si por ejemplo absorbe o libera mucho o poco dióxido de carbono. Si respiro mal y se me acumula mucho CO2 o si por el contrario tengo poco C2 igual me perjudica. Las células no pueden trabajar correctamente nuestro cuerpo no absorbe igual los nutrientes, nuestra respiración influye en cómo nuestro cuerpo absorbe las vitaminas y minerales que necesita nuestro cuerpo. Equilibrio. Respirar correctamente, dormir bien, contacto con la naturaleza, aire fresco y puro. En una forma similar, cuando una persona está hambrienta, el intervalo de referencia de la intensidad metabólica puede revalorarse abajo del normal. Esta baja en la intensidad metabólica es un intento del cuerpo por detener las lesiones debidas a la falta de alimentación y mantenerse funcionando a un nivel metabólico más bajo. Por ello, algunas personas que dejan de comer periódicamente en un intento por perder peso, encuentran que después de una baja inicial de peso se hace difícil perder más. Los problemas metabólicos del sobrepeso que se pueden solucionar con una dieta equilibrada, sin necesidad de tener hambre pero tampoco alimentarse en exceso y añadir ejercicio para cambiar ese pH acido que los provoca y regular nuestros niveles. El cuerpo se las arregla para sobrevivir. Pero para hacerlo de la mejor manera recordemos, dieta equilibrada, pensamientos equilibrados, respiración equilibrada, ejercicio equilibrado. Si mantenemos todo en equilibrio entonces podremos ir más allá de nuestra razón existencial cuando de manera equilibrada terminen los días de nuestra vida.

Para realizar ejercicio en su casa, puede solicitar informes en 627 1112423

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