Busco con frecuencia encontrarle el sentido a las situaciones que me enfrento, trato de entender el porqué suceden las cosas, enumerar un sin fin de pensamientos a los cuales darles alguna explicación. Veo como al pasar del tiempo cada una de nuestras emociones viven en constante apego a lo que están experimentando.
Cada momento es importante, el salir de madrugada a subir una montaña muy alta, desayunar tranquilamente con el delicioso café resaltando su gran aroma, el recibir la llamada de la empresa a la cual estás aplicando para un empleo que cumplía con tu crecimiento profesional que tanto anhelas.
Deseo que logres conectar con las palabras que estás leyendo esta ocasión, se que para muchas personas el estar conociéndose a sí mismos es algo muy retador, resulta no tan favorable cuando vemos a través del cristal quienes somos en realidad, acostumbramos a observar la vida como si trajeras lentes obscuros, no queremos ver la luz que nosotros mismos podríamos tener.
Imagínate que estás dentro de un hermoso bosque, observamos que a tu alrededor lo único que hay son pinos, sientes como si en ese lugar fuera una película porque la belleza deslumbra cualquier defecto que pudieras encontrar, no dejes de imaginar que te encuentras en ese lugar, el aroma de la naturaleza, tu piel empieza a sentir lo fresco que se ha convertido el clima en ese lugar, ¿recuerdas cuándo fue la última ves que viviste un momento como ese?
Vivimos de una forma a la cual le hemos perdido la importancia de apreciar el ambiente en el que estamos, algo que para muchos resulta insignificante, para otros será la última vez que lo podrán ver, oler o sentir en sus manos.
Imagino el momento en el cual podamos estar atentos a lo que nos rodea, estar a la expectativa de lo que sucederá, ver con detenimiento como las aves vuelan de un lado al otro, dejar que todos mis pensamientos se detengan por un instante. Vivir una vida de la cual me sienta pleno cuando me toque partir, no está mal enfocarnos en la superación profesional o que nos vaya mejor en nuestros negocios, pero observo tantas vidas desconectadas a lo que está sucediendo a su alrededor.
Por mucho tiempo vivía de esa manera buscando como conseguir mas y mas para no quedarme en el mismo lugar donde me encontraba, nadando contra corriente, viendo como el viento se llevaba muchas veces sueños o debía dejar algo que quería en el camino.
Intenta entrar a lo desconocido, no tengas miedo por lo que vas a encontrar detrás de la cortina, nos privamos de vivir tantos momentos tan increíbles por la pereza de quedarnos donde estamos, siempre nos llamaran locos, inmaduros o hasta torpes a aquellos que queremos hacer cosas fuera de lo normal, rompe el molde, aprende que el tiempo jamás será igual que ayer, vuela, es tiempo, no te quedes en el nido.
Lic. Maxi Joel Nevàrez Ramírez | Administrador Gubernamental
