/ viernes 9 de noviembre de 2018

El poder de creer

Una de las mayores cualidades que tienen los seres humanos es su capacidad de creer. En el creer tenemos un poder increíble. Lo único que necesitamos para que los milagros sucedan, es creer firmemente que estos llegarán.

Para tener esa fuerza suprema, hay que desarrollar nuevascreencias y erradicar malos hábitos. Hay que reprogramar nuestra mente y volver a sercomo en la infancia,ir del no puedo al claro que puedo, del no mejoraré, al ¡Estoy logrando mi plenitud! Si creemospodemos llegar aser exitosos, ser felices, vencer cualquier obstáculo; vivir libres de dolor, angustias o temor,mudarnos a un lugar más bonito etc… etc.

Lo que se cree firmemente puede anular cualquier ley natural, ya que es ascender hacia otra dimensión superior a la terrenal. La creencia o fe, es mayor que el más fatal informe médico; que nuestras deudas y preocupaciones, mayor que el tamaño de lo que afrontemos. Aún lo imposible es posible de lograr; restaurar nuestra vida, familia, relaciones, estar sanos, vencer adicciones o malas inclinaciones, aún los errores de nuestro pasado; si creemos firmemente y hacemos lo que debemos, por supuesto que lo lograremos.

Hacer que nuestras vidas vayan en la dirección correcta no es difícil ni complicado. Al poder de creer debemos agregarle la fuerza de la acción, de la energía cósmica, de lo divino, y del poder personal. En la vida todo es energía; gravitamos en un campo que repele o atrae lo que nos afecta o necesitamos,. Las leyes invisibles no pierden su cometido, ”Lo que siembras cosechas”, “Tal semilla siembras , tal fruto recoges” “Lo que buscas y necesitas, de acuerdo a tus pensamientos y acciones, lo obtendrás”. Estamos en consonancia con lo que tenemos, si somos religiosos atraemos bendiciones, si somos poco o nada creyentes, las desgracias no nos abandonarán.

Lo sobrenatural y lo divino, no lo gozamos por nuestra falta de conocimiento, alejamiento y mal actuar; esa sí es la mejor fuerza en la que podemos gravitar. Su potencial radica en la oración, doblar rodillas; rosarios fervorosos y si son a diario, mejor, todo lo podemos lograr. Cuando creemos firmemente en que algo bueno nos sucederá, lo celestial nos acompaña. El poder de Dios ayuda a los que creen y no traiciona a los que en él esperan. Las fuerzas de la oscuridad no pueden evitar que nos llegue lo que deba de ser.

Hay que creer y no dudar. Permitamos que nuestros sueños campeen; solo es cuestión de tiempo para disfrutarlos, las respuestas vienen detrás de la paciencia. Demos gracias de antemano y esperemos grandezas que no podíamos imaginar.

Una de las mayores cualidades que tienen los seres humanos es su capacidad de creer. En el creer tenemos un poder increíble. Lo único que necesitamos para que los milagros sucedan, es creer firmemente que estos llegarán.

Para tener esa fuerza suprema, hay que desarrollar nuevascreencias y erradicar malos hábitos. Hay que reprogramar nuestra mente y volver a sercomo en la infancia,ir del no puedo al claro que puedo, del no mejoraré, al ¡Estoy logrando mi plenitud! Si creemospodemos llegar aser exitosos, ser felices, vencer cualquier obstáculo; vivir libres de dolor, angustias o temor,mudarnos a un lugar más bonito etc… etc.

Lo que se cree firmemente puede anular cualquier ley natural, ya que es ascender hacia otra dimensión superior a la terrenal. La creencia o fe, es mayor que el más fatal informe médico; que nuestras deudas y preocupaciones, mayor que el tamaño de lo que afrontemos. Aún lo imposible es posible de lograr; restaurar nuestra vida, familia, relaciones, estar sanos, vencer adicciones o malas inclinaciones, aún los errores de nuestro pasado; si creemos firmemente y hacemos lo que debemos, por supuesto que lo lograremos.

Hacer que nuestras vidas vayan en la dirección correcta no es difícil ni complicado. Al poder de creer debemos agregarle la fuerza de la acción, de la energía cósmica, de lo divino, y del poder personal. En la vida todo es energía; gravitamos en un campo que repele o atrae lo que nos afecta o necesitamos,. Las leyes invisibles no pierden su cometido, ”Lo que siembras cosechas”, “Tal semilla siembras , tal fruto recoges” “Lo que buscas y necesitas, de acuerdo a tus pensamientos y acciones, lo obtendrás”. Estamos en consonancia con lo que tenemos, si somos religiosos atraemos bendiciones, si somos poco o nada creyentes, las desgracias no nos abandonarán.

Lo sobrenatural y lo divino, no lo gozamos por nuestra falta de conocimiento, alejamiento y mal actuar; esa sí es la mejor fuerza en la que podemos gravitar. Su potencial radica en la oración, doblar rodillas; rosarios fervorosos y si son a diario, mejor, todo lo podemos lograr. Cuando creemos firmemente en que algo bueno nos sucederá, lo celestial nos acompaña. El poder de Dios ayuda a los que creen y no traiciona a los que en él esperan. Las fuerzas de la oscuridad no pueden evitar que nos llegue lo que deba de ser.

Hay que creer y no dudar. Permitamos que nuestros sueños campeen; solo es cuestión de tiempo para disfrutarlos, las respuestas vienen detrás de la paciencia. Demos gracias de antemano y esperemos grandezas que no podíamos imaginar.