/ viernes 24 de diciembre de 2021

Degustando La Vida | Más que los regalos, intercambiemos buenos deseos está navidad

En esta navidad, antes de ir a las tiendas a comprar grandes marcas de regalos con los que vas a quedar súper bien con la gente que quieres, piensa en cuánto vale y qué poco cuesta regalar sentimientos, piensa en qué puedes hacer realmente por ellos, cuánto de corazón te importan y piensa también en cuánta gente hay por el mundo que solo desearía que alguien le pudiera regalar una simple pero bonita sonrisa, que no se gasta, permanece en el tiempo, es contagiosa, y puede incluso llegar a cambiarle el día o la vida a una persona, nunca se sabe; los regalos "llevan el sello personal de quienes los realizan y pueden mantener latente el deseo de querer perdurar en el recuerdo del otro", según señalan los especialistas ante la proximidad de las fiestas navideñas, una época que se caracteriza por los presentes a conocidos, amigos y familiares. El acto de regalar está pensado, en términos generales como un acto de amor, de dar y recibir, en el que hay una búsqueda y una significación que adquiere características particulares, que tiene que ver con el tipo de vínculo, con las circunstancias por las que atraviesa esa relación, y con el contexto general, a la vez el objeto, que por sí mismo no significa nada cobra un sentido en el momento de la elección por parte del regalador, y vuelve a resignificarse en manos del obsequiado, aunque hay ocasiones en que el proceso es inverso y el regalo termina siendo una simple mercancía despegada de los afectos. Algo que se ha convertido en parte importante de las celebraciones navideñas es el intercambio de regalos con familiares y amigos; en su mayoría, estos regalos son cosas materiales, pero debemos de tener siempre en cuenta la parte más importante del obsequio que es la energía que nosotros ponemos en él. El regalarse unos a otros tiene mucho más significado del que podemos imaginar, pues lo más importante de esto reside en el hecho de entregar “algo” que simbólicamente represente nuestros deseos; en estas fechas de amor y convivencia de la familia, es muy importante considerar que el valor del mismo lo define el amor con el que fue elegido para esa persona especial. Con el sólo hecho de tener en nuestras mentes y corazones a aquellas personas a las que deseamos regalar, desde ese instante ya estamos generando en nosotros una energía fuerte y poderosa que, al momento de elegir el regalo, de inmediato lo llenará de todos esos pensamientos y sentimientos que acompañarán por siempre al presente elegido. La parte material del obsequio representaba sólo la forma física que guardaba en sí el verdadero regalo, el creado por sus pensamientos y sentimientos, pues ése era el que contenía parte de su alma y por lo tanto ese era su gran valor. También es de suma trascendencia la envoltura de los regalos, que es parte ritual de lo que entregaremos a nuestros amigos o familiares. Muchos no disfrutamos o no sabemos cómo envolver o presentar un obsequio, sin embargo, es importante que la mayoría de los regalos o al menos los más importantes sean envueltos con nuestras propias manos, ya que de esa forma estamos poniendo todos los deseos de Amor al imaginar la alegría del que lo recibirá. Por lo tanto, es importante que al momento de la envoltura tratemos de sentir vivamente lo que queremos para la persona y transmitamos esos sentimientos a la materia, pues también es energía al igual que nosotros y nuestros sentimientos.

Steve Sánchez Ribota | Profesor

En esta navidad, antes de ir a las tiendas a comprar grandes marcas de regalos con los que vas a quedar súper bien con la gente que quieres, piensa en cuánto vale y qué poco cuesta regalar sentimientos, piensa en qué puedes hacer realmente por ellos, cuánto de corazón te importan y piensa también en cuánta gente hay por el mundo que solo desearía que alguien le pudiera regalar una simple pero bonita sonrisa, que no se gasta, permanece en el tiempo, es contagiosa, y puede incluso llegar a cambiarle el día o la vida a una persona, nunca se sabe; los regalos "llevan el sello personal de quienes los realizan y pueden mantener latente el deseo de querer perdurar en el recuerdo del otro", según señalan los especialistas ante la proximidad de las fiestas navideñas, una época que se caracteriza por los presentes a conocidos, amigos y familiares. El acto de regalar está pensado, en términos generales como un acto de amor, de dar y recibir, en el que hay una búsqueda y una significación que adquiere características particulares, que tiene que ver con el tipo de vínculo, con las circunstancias por las que atraviesa esa relación, y con el contexto general, a la vez el objeto, que por sí mismo no significa nada cobra un sentido en el momento de la elección por parte del regalador, y vuelve a resignificarse en manos del obsequiado, aunque hay ocasiones en que el proceso es inverso y el regalo termina siendo una simple mercancía despegada de los afectos. Algo que se ha convertido en parte importante de las celebraciones navideñas es el intercambio de regalos con familiares y amigos; en su mayoría, estos regalos son cosas materiales, pero debemos de tener siempre en cuenta la parte más importante del obsequio que es la energía que nosotros ponemos en él. El regalarse unos a otros tiene mucho más significado del que podemos imaginar, pues lo más importante de esto reside en el hecho de entregar “algo” que simbólicamente represente nuestros deseos; en estas fechas de amor y convivencia de la familia, es muy importante considerar que el valor del mismo lo define el amor con el que fue elegido para esa persona especial. Con el sólo hecho de tener en nuestras mentes y corazones a aquellas personas a las que deseamos regalar, desde ese instante ya estamos generando en nosotros una energía fuerte y poderosa que, al momento de elegir el regalo, de inmediato lo llenará de todos esos pensamientos y sentimientos que acompañarán por siempre al presente elegido. La parte material del obsequio representaba sólo la forma física que guardaba en sí el verdadero regalo, el creado por sus pensamientos y sentimientos, pues ése era el que contenía parte de su alma y por lo tanto ese era su gran valor. También es de suma trascendencia la envoltura de los regalos, que es parte ritual de lo que entregaremos a nuestros amigos o familiares. Muchos no disfrutamos o no sabemos cómo envolver o presentar un obsequio, sin embargo, es importante que la mayoría de los regalos o al menos los más importantes sean envueltos con nuestras propias manos, ya que de esa forma estamos poniendo todos los deseos de Amor al imaginar la alegría del que lo recibirá. Por lo tanto, es importante que al momento de la envoltura tratemos de sentir vivamente lo que queremos para la persona y transmitamos esos sentimientos a la materia, pues también es energía al igual que nosotros y nuestros sentimientos.

Steve Sánchez Ribota | Profesor