/ viernes 15 de octubre de 2021

Degustando La Vida | La importancia y beneficio de mantener una actitud positiva ante toda enfermedad

El día 19 de octubre es el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, y como todos los padecimientos de esta naturaleza, es un momento que hay que aprovechar para reflexionar en dos cosas muy importantes: la probabilidad de que ocurra este padecimiento, y qué podemos hacer para prevenir y proteger. El cáncer de mama debe dejarse de ver sólo como cifras de mortandad y enfocar su atención igual que una enfermedad crónica degenerativa, que necesita enfrentarse con prevención, cambios de cultura, educación y hábitos; culturalmente, se debe trabajar más, pues hoy en día hay mujeres que se diagnostican con cáncer y deciden no tratarse, porque creen que es una enfermedad terminal, aun y cuando ya los tratamientos son más efectivos y dirigidos con menos efectos secundarios; pero seguimos viviendo en el mito, esa situación se ve reflejada en un cambio en su forma de vida, desde la relación con sus familiares, amigos y en el ambiente laboral, pues manifiestan enojo que les provoca distanciamiento y poca comunicación, aunado a problemas económicos, por los gastos que le generará su atención. La femineidad, más que un atributo, es una actitud que emana del fondo del alma de una mujer, pero no podemos negar el hecho de que para ellas los senos son más que órganos sexuales externos; son parte integral de su identidad, y cualquier amenaza a su integridad es un fuerte atentado contra su ser. Hoy en día el cáncer de mama es una de las principales preocupaciones de la mujer moderna, pues esta malignidad es una de las que más les arrebata la vida en el mundo, aunque científicos de todo el mundo buscan incansablemente un tratamiento efectivo y, ¿por qué no?, la cura definitiva, las estadísticas nos dan un panorama sombrío. La incidencia y mortalidad por cáncer de mama siguen siendo inaceptables, tú puedes disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de mama significativamente llevando a cabo pequeños cambios, como mejorar tu dieta, hacer ejercicio y controlar tu peso al hacer mejores elecciones en cuanto a tu estilo de vida, incluyendo un balance hormonal. Es importante hacer énfasis en esto: sencillos cambios en tu estilo de vida pueden disminuir a más de la mitad el riesgo de adquirir un cáncer de mama.

A lo largo de nuestra vida, en general, nos toca ver partir a nuestros seres queridos, el dolor que nos ocasiona su partida no concluye con el último adiós; al contrario, quedan en nosotros para siempre sus recuerdos y las causas o enfermedades que les y nos hicieron sufrir y al final quitaron la vida. Con respeto y profundo sentimiento, en honor a las mujeres que han partido por el cáncer de mama; si en verdad las amamos es urgente que exhortemos a todas las Mujeres cercanas a nuestro corazón y a nuestro alrededor, a practicarse autoexámenes regulares y a tomarse por lo menos una mamografía al año.

Promovamos con respeto, que en nuestra comunidad exista la cultura de la prevención para evitar mayores sufrimientos por el cáncer de mama, ayudemos a que nuestras amadas mujeres se hagan el autoexamen y que se convierta en un hábito para cuidar su salud.

Lo ideal es detectar el riesgo antes de que se palpe como síntoma de cáncer de mama; la mamografía, es el único método por excelencia para la detección del cáncer de mama.


La actitud es una pequeña cosa que hace una gran diferencia.

Steve Sánchez Ribota | Profesor


El día 19 de octubre es el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, y como todos los padecimientos de esta naturaleza, es un momento que hay que aprovechar para reflexionar en dos cosas muy importantes: la probabilidad de que ocurra este padecimiento, y qué podemos hacer para prevenir y proteger. El cáncer de mama debe dejarse de ver sólo como cifras de mortandad y enfocar su atención igual que una enfermedad crónica degenerativa, que necesita enfrentarse con prevención, cambios de cultura, educación y hábitos; culturalmente, se debe trabajar más, pues hoy en día hay mujeres que se diagnostican con cáncer y deciden no tratarse, porque creen que es una enfermedad terminal, aun y cuando ya los tratamientos son más efectivos y dirigidos con menos efectos secundarios; pero seguimos viviendo en el mito, esa situación se ve reflejada en un cambio en su forma de vida, desde la relación con sus familiares, amigos y en el ambiente laboral, pues manifiestan enojo que les provoca distanciamiento y poca comunicación, aunado a problemas económicos, por los gastos que le generará su atención. La femineidad, más que un atributo, es una actitud que emana del fondo del alma de una mujer, pero no podemos negar el hecho de que para ellas los senos son más que órganos sexuales externos; son parte integral de su identidad, y cualquier amenaza a su integridad es un fuerte atentado contra su ser. Hoy en día el cáncer de mama es una de las principales preocupaciones de la mujer moderna, pues esta malignidad es una de las que más les arrebata la vida en el mundo, aunque científicos de todo el mundo buscan incansablemente un tratamiento efectivo y, ¿por qué no?, la cura definitiva, las estadísticas nos dan un panorama sombrío. La incidencia y mortalidad por cáncer de mama siguen siendo inaceptables, tú puedes disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de mama significativamente llevando a cabo pequeños cambios, como mejorar tu dieta, hacer ejercicio y controlar tu peso al hacer mejores elecciones en cuanto a tu estilo de vida, incluyendo un balance hormonal. Es importante hacer énfasis en esto: sencillos cambios en tu estilo de vida pueden disminuir a más de la mitad el riesgo de adquirir un cáncer de mama.

A lo largo de nuestra vida, en general, nos toca ver partir a nuestros seres queridos, el dolor que nos ocasiona su partida no concluye con el último adiós; al contrario, quedan en nosotros para siempre sus recuerdos y las causas o enfermedades que les y nos hicieron sufrir y al final quitaron la vida. Con respeto y profundo sentimiento, en honor a las mujeres que han partido por el cáncer de mama; si en verdad las amamos es urgente que exhortemos a todas las Mujeres cercanas a nuestro corazón y a nuestro alrededor, a practicarse autoexámenes regulares y a tomarse por lo menos una mamografía al año.

Promovamos con respeto, que en nuestra comunidad exista la cultura de la prevención para evitar mayores sufrimientos por el cáncer de mama, ayudemos a que nuestras amadas mujeres se hagan el autoexamen y que se convierta en un hábito para cuidar su salud.

Lo ideal es detectar el riesgo antes de que se palpe como síntoma de cáncer de mama; la mamografía, es el único método por excelencia para la detección del cáncer de mama.


La actitud es una pequeña cosa que hace una gran diferencia.

Steve Sánchez Ribota | Profesor