/ viernes 20 de mayo de 2022

Curanderos | Tomando las riendas de mi enfermedad...

En mi consultorio les explico a mis pacientes sobre la importancia de que tomen el control de su enfermedad cuando es crónica - degenerativa (no se va a curar, por ejemplo la hipertensión o la diabetes), antes de que la enfermedad tome el control de su vida, pero esto ¿como puede suceder?, es muy sencillo en ocasiones cuando se nos diagnostica una enfermedad un reflejo humano es negar y basados en creencias con poco fundamento pensar que el medicamento nos va a perjudicar el riñón o hígado; siendo comúnmente lo contrario , ya que una diabetes o presión arterial con mal control es más probable que a mediano o largo plazo llegue a provocar daño en algunos órganos.

En muchas de las ocasiones cuando nos dan un diagnostico, al inicio nos medio cuidamos y cuando nos sentimos mejor abandonamos el tratamiento, lo cual genera regularmente que se complique la enfermedad después de cierto tiempo, con esto les indico a mis pacientes que el cuidarse o no cuidarse es como un embarazo, y así como una mujer no puede estar "medio embarazada" un enfermo no puede "medio cuidarse" cayendo en que no se cuida adecuadamente.

El tomar las rienda de nuestra enfermedad -hago la metáfora- es como si de pronto despertamos sobre un caballo que no conocemos donde no sabemos montar, pero el caballo ya está avanzando ( así es una enfermedad con diagnóstico reciente, cuando nos la detectan , tiene tiempo que ya estaba en nuestro cuerpo regularmente), lo primero que debemos de hacer es tomar conciencia de la situación y buscar cómo controlar el caballo (conocer la enfermedad, pedir asesoría técnica adecuada -aquí entra el médico-, seguir el tratamiento), encontrar las riendas y poder no solo guiar al caballo, sino reducir la velocidad e incluso disfrutar el viaje.

Pero qué pasa si nos despertamos sobre el caballo, asustados y tratando de negar nuestra realidad en ese momento; nuestra cabalgadura se dirigirá a donde quiera y en algún punto nos puede tirar, similar a como pasa con la enfermedad cuando negamos el diagnóstico reciente, por lo tanto su tratamiento y las consecuencias llegarán tarde que temprano es decir sus complicaciones.

La presión arterial cuando se sube es común que de síntomas como dolor de cabeza, mareo o zumbido de oídos, pero en ocasiones no manifiesta síntomas lo cual puede ser contraproducente, como cuando se le esta saliendo el aceite a un carro sin encender el aviso en el tablero, ello genera que tenga una falla mayor que se pudo corregir si hubiese avisado, los síntomas de las enfermedades no son malos, son un aviso de que algo en nuestro cuerpo no está funcionando de manera correcta y con ello buscar ayuda oportunamente.

Otro ejemplo es con la diabetes mellitus, esta enfermedad por mucho tiempo puede dar síntomas mínimos como aumento de sed, más hambre y orinar más seguido, pero seguir siendo funcionales, sin dolor y esto hace que el paciente descuide su tratamiento y acelerar el tiempo en que se presenten las complicaciones, haciendo mención que todas las escuchadas son reales, desde las amputaciones, pérdida de la visión, insuficiencia renal con diálisis, pero cuando se presentan estas complicaciones es demasiado tarde.

El adecuado control de las enfermedades crónico-degenerativas aleja las complicaciones en nuestro cuerpo, confíen en su médico, procuren apegarse a las indicaciones y pregunten en consulta las dudas que tengan, después del médico quien debe conocer más sobre la enfermedad es el paciente y con el favor de Dios no se llegara a tener complicaciones, se tendrá un adecuado control de nuestra enfermedad es decir tomar las riendas de ella y tener un viaje agradable.


Dr. Odín Isaac Gerónimo Cid | Médico Cirujano Militar

En mi consultorio les explico a mis pacientes sobre la importancia de que tomen el control de su enfermedad cuando es crónica - degenerativa (no se va a curar, por ejemplo la hipertensión o la diabetes), antes de que la enfermedad tome el control de su vida, pero esto ¿como puede suceder?, es muy sencillo en ocasiones cuando se nos diagnostica una enfermedad un reflejo humano es negar y basados en creencias con poco fundamento pensar que el medicamento nos va a perjudicar el riñón o hígado; siendo comúnmente lo contrario , ya que una diabetes o presión arterial con mal control es más probable que a mediano o largo plazo llegue a provocar daño en algunos órganos.

En muchas de las ocasiones cuando nos dan un diagnostico, al inicio nos medio cuidamos y cuando nos sentimos mejor abandonamos el tratamiento, lo cual genera regularmente que se complique la enfermedad después de cierto tiempo, con esto les indico a mis pacientes que el cuidarse o no cuidarse es como un embarazo, y así como una mujer no puede estar "medio embarazada" un enfermo no puede "medio cuidarse" cayendo en que no se cuida adecuadamente.

El tomar las rienda de nuestra enfermedad -hago la metáfora- es como si de pronto despertamos sobre un caballo que no conocemos donde no sabemos montar, pero el caballo ya está avanzando ( así es una enfermedad con diagnóstico reciente, cuando nos la detectan , tiene tiempo que ya estaba en nuestro cuerpo regularmente), lo primero que debemos de hacer es tomar conciencia de la situación y buscar cómo controlar el caballo (conocer la enfermedad, pedir asesoría técnica adecuada -aquí entra el médico-, seguir el tratamiento), encontrar las riendas y poder no solo guiar al caballo, sino reducir la velocidad e incluso disfrutar el viaje.

Pero qué pasa si nos despertamos sobre el caballo, asustados y tratando de negar nuestra realidad en ese momento; nuestra cabalgadura se dirigirá a donde quiera y en algún punto nos puede tirar, similar a como pasa con la enfermedad cuando negamos el diagnóstico reciente, por lo tanto su tratamiento y las consecuencias llegarán tarde que temprano es decir sus complicaciones.

La presión arterial cuando se sube es común que de síntomas como dolor de cabeza, mareo o zumbido de oídos, pero en ocasiones no manifiesta síntomas lo cual puede ser contraproducente, como cuando se le esta saliendo el aceite a un carro sin encender el aviso en el tablero, ello genera que tenga una falla mayor que se pudo corregir si hubiese avisado, los síntomas de las enfermedades no son malos, son un aviso de que algo en nuestro cuerpo no está funcionando de manera correcta y con ello buscar ayuda oportunamente.

Otro ejemplo es con la diabetes mellitus, esta enfermedad por mucho tiempo puede dar síntomas mínimos como aumento de sed, más hambre y orinar más seguido, pero seguir siendo funcionales, sin dolor y esto hace que el paciente descuide su tratamiento y acelerar el tiempo en que se presenten las complicaciones, haciendo mención que todas las escuchadas son reales, desde las amputaciones, pérdida de la visión, insuficiencia renal con diálisis, pero cuando se presentan estas complicaciones es demasiado tarde.

El adecuado control de las enfermedades crónico-degenerativas aleja las complicaciones en nuestro cuerpo, confíen en su médico, procuren apegarse a las indicaciones y pregunten en consulta las dudas que tengan, después del médico quien debe conocer más sobre la enfermedad es el paciente y con el favor de Dios no se llegara a tener complicaciones, se tendrá un adecuado control de nuestra enfermedad es decir tomar las riendas de ella y tener un viaje agradable.


Dr. Odín Isaac Gerónimo Cid | Médico Cirujano Militar