/ martes 5 de julio de 2022

Cuidando nuestra salud... | Y tú, ¿cómo manejas tus emociones?

1era. Parte.

Cada vez escuchamos conceptos como Inteligencia emocional, ¿pero realmente sabemos lo qué significa?, ¿Estamos conscientes de la importancia que tiene al hablar de salud mental?

Las personas al nacer somos seres en crecimiento con capacidad de transformarnos, cada uno de nosotros es único e irrepetible, con una personalidad en desarrollo, compuesta a grandes rasgos del temperamento, la parte que heredamos (nuestro disco duro) y el carácter, la parte que vamos regulando y formando con el trato social y el aprendizaje. Lo cual nos hace diferentes, especiales, e irrepetibles.

La inteligencia emocional (I.E.) se va desarrollando a lo largo de la vida, en base a la experiencia y aprendizaje que se va adquiriendo. Cada uno de nosotros ha ido desarrollando habilidades de I.E., sin ser conscientes de ello, es muy importante ser conscientes, para poder crecer, transformarnos en mejores personas, por eso la relevancia en prepararnos constantemente y poner el nombre adecuado a las “cosas”.

Pero ¿qué es inteligencia emocional? Es la capacidad que tiene una persona de manejar y desenvolverse de manera adecuada ante las diferentes situaciones que se le presenten en la vida haciendo un uso adecuado de sus emociones y comportarse de manera adecuada. Implica percibir, expresar, comprender y gestionar las emociones con conductas adecuadas y comprender las emociones de los demás.

Es absolutamente necesaria para formar, desarrollar y mantener relaciones personales cercanas. Saber hacerlo es esencial no sólo para la vida personal sino laboral. En ocasiones se puede sentir cierta dificultad para relacionarse o crear vínculos con los demás. Sin embargo es de destacar que la Inteligencia emocional se puede desarrollar, si trabajas conscientemente ciertas habilidades y puede evolucionar y aumentar con la práctica.

Marca gran diferencia entre conseguir ese trabajo, o llevarse bien en un grupo determinado. Entre ser funcional o no serlo. Si uno trabaja su inteligencia emocional va a notar cambios importantes en la forma en la que se siente, conoce, percibe y relaciona consigo mismo y los demás. Teniendo una actitud positiva, sana, con más recursos psicológicos para afrontar las diversas adversidades a las que uno se enfrenta en la vida, como conflictos o crisis por la edad y etapa del desarrollo que se encuentre, pandemia, duelos, despidos, divorcios, negociaciones, guerras, conflictos económicos, sociales, etc… Contamos con dos inteligencias: La intelectual y la inteligencia emocional. Ambas se trabajan toda la vida pero el coeficiente intelectual (IQ) no varía sustancialmente a lo largo de esta y la inteligencia emocional sí.

Las emociones son contagiosas y es importante conocerlas e identificar cuándo, cómo y dónde, nos sentimos de determinada manera. Y al decir contagiosas no se si les ha pasado estar en un lugar y que alguien se esté riendo muy rico o está contento, hasta ustedes se empiezan a reír o mínimo sonríen, y por el contrario llega uno a un lugar y la otra persona está de genio o con su “carota”, uno se pone así o se aleja, al igual con emociones de tristeza, cuando ve uno a alguien llorar o sufrir uno se siente mal, se siente triste… Esto es, por la capacidad de ser empáticos.

Cabe destacar que hay personas que presentan alexitimia que es la incapacidad de identificar, reconocer, nombrar o describir las emociones o sentimientos propios con especial dificultad para hallar palabras para describirlos. Pobreza en la expresión verbal, mímica o gestual de las emociones o los sentimientos. Y también para reconocerlos en los demás. Siendo un grave problema para relacionarse y vincularse de manera profunda con los demás.

Nos vemos la próxima semana, aprendiendo más sobre Inteligencia emocional, para transformar nuestra realidad e influir en los demás de forma positiva.


Jessica Cano Gasperin | Psicoterapeuta

1era. Parte.

Cada vez escuchamos conceptos como Inteligencia emocional, ¿pero realmente sabemos lo qué significa?, ¿Estamos conscientes de la importancia que tiene al hablar de salud mental?

Las personas al nacer somos seres en crecimiento con capacidad de transformarnos, cada uno de nosotros es único e irrepetible, con una personalidad en desarrollo, compuesta a grandes rasgos del temperamento, la parte que heredamos (nuestro disco duro) y el carácter, la parte que vamos regulando y formando con el trato social y el aprendizaje. Lo cual nos hace diferentes, especiales, e irrepetibles.

La inteligencia emocional (I.E.) se va desarrollando a lo largo de la vida, en base a la experiencia y aprendizaje que se va adquiriendo. Cada uno de nosotros ha ido desarrollando habilidades de I.E., sin ser conscientes de ello, es muy importante ser conscientes, para poder crecer, transformarnos en mejores personas, por eso la relevancia en prepararnos constantemente y poner el nombre adecuado a las “cosas”.

Pero ¿qué es inteligencia emocional? Es la capacidad que tiene una persona de manejar y desenvolverse de manera adecuada ante las diferentes situaciones que se le presenten en la vida haciendo un uso adecuado de sus emociones y comportarse de manera adecuada. Implica percibir, expresar, comprender y gestionar las emociones con conductas adecuadas y comprender las emociones de los demás.

Es absolutamente necesaria para formar, desarrollar y mantener relaciones personales cercanas. Saber hacerlo es esencial no sólo para la vida personal sino laboral. En ocasiones se puede sentir cierta dificultad para relacionarse o crear vínculos con los demás. Sin embargo es de destacar que la Inteligencia emocional se puede desarrollar, si trabajas conscientemente ciertas habilidades y puede evolucionar y aumentar con la práctica.

Marca gran diferencia entre conseguir ese trabajo, o llevarse bien en un grupo determinado. Entre ser funcional o no serlo. Si uno trabaja su inteligencia emocional va a notar cambios importantes en la forma en la que se siente, conoce, percibe y relaciona consigo mismo y los demás. Teniendo una actitud positiva, sana, con más recursos psicológicos para afrontar las diversas adversidades a las que uno se enfrenta en la vida, como conflictos o crisis por la edad y etapa del desarrollo que se encuentre, pandemia, duelos, despidos, divorcios, negociaciones, guerras, conflictos económicos, sociales, etc… Contamos con dos inteligencias: La intelectual y la inteligencia emocional. Ambas se trabajan toda la vida pero el coeficiente intelectual (IQ) no varía sustancialmente a lo largo de esta y la inteligencia emocional sí.

Las emociones son contagiosas y es importante conocerlas e identificar cuándo, cómo y dónde, nos sentimos de determinada manera. Y al decir contagiosas no se si les ha pasado estar en un lugar y que alguien se esté riendo muy rico o está contento, hasta ustedes se empiezan a reír o mínimo sonríen, y por el contrario llega uno a un lugar y la otra persona está de genio o con su “carota”, uno se pone así o se aleja, al igual con emociones de tristeza, cuando ve uno a alguien llorar o sufrir uno se siente mal, se siente triste… Esto es, por la capacidad de ser empáticos.

Cabe destacar que hay personas que presentan alexitimia que es la incapacidad de identificar, reconocer, nombrar o describir las emociones o sentimientos propios con especial dificultad para hallar palabras para describirlos. Pobreza en la expresión verbal, mímica o gestual de las emociones o los sentimientos. Y también para reconocerlos en los demás. Siendo un grave problema para relacionarse y vincularse de manera profunda con los demás.

Nos vemos la próxima semana, aprendiendo más sobre Inteligencia emocional, para transformar nuestra realidad e influir en los demás de forma positiva.


Jessica Cano Gasperin | Psicoterapeuta