/ lunes 1 de julio de 2019

¡Adiós, muchachito!

A los cinco años de edad, Rodolfo, sus padres, y hermanos, se mudaban de Chilpancingo a la capital mexicana, era la segunda mitad de la década de los años cincuenta. A la mayoría de esos chicos al preguntarles de lo qué serían de grandes, la mayoría contestaba que, curas, bomberos o astronautas; hoy en día la respuesta escalofriante y, de moda es: Sicario... ¡Ciao Bambino!: (Canción con Mireille Mathew que hacíamos repetir seguidamente al estar armando esta historia y "despidiéndo muchachitos", aunque estuviera la letra de la rola en francés y su título en Italaino, llamaba poderosamente la atención una frase que, hacíamos lo posible para entender, adelante sabremos porqué...)

Rodolfo, recibiría en 1975 el título en ingeniería mecánica-eléctrica con especialidad en comunicaciones en la UNAM; estudió la maestría en sistemas de telecomunicación entre 1975 y 1976 en la Universidad de Essex, en el Reino Unido; obtuvo el grado de doctor en radiación electromagnética en la Universidad de Birmingham, Reino Unido, en 1979, y en esa misma institución realizó investigaciones post-doctorales en Guías de Ondas.

El sueño habría de cumplírsele, ¡Ciao Bambino!...Participó como especialista en la Misión del Transbordador Espacial Atlantis, llevando a cabo una serie de experimentos diseñados por científicos mexicanos. La misión despegó la noche del 26 de noviembre de 1985 desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida, y regresó a tierra en la Base Edwards de la Fuerza Aérea Estadounidense en California el 3 de diciembre. El objetivo principal era poner en órbita tres satélites de comunicación, entre ellos el Morelos II. El doctor Neri Vela participó, de 1989 a 1990, en el diseño de la Estación Espacial Alfa, de la Agencia Espacial Europea, y en los últimos años se ha desempeñado como profesor de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, impartiendo cursos de matemáticas, teoría electromagnética, circuitos eléctricos, análisis de señales, antenas y comunicación por satélite, información fruto de su trabajo en el Instituto de Investigación Eléctrica, en México, en el Grupo de Radiocomunicaciones. Ha trabajado también en el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de EUA y Reino Unido, en la Asociación Mexicana de Ingenieros en Comunicaciones y en el Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas. Durante el 2010 y 2011 colaboró en la creación de la Agencia Espacial Mexicana. Se dedica a la divulgación científica y a dar cátedra con respecto a la termodinámica y la ingeniería espacial.

En 1986, impartió una conferencia en el actual Teatro de los Héroes en la ciudad de Chihuahua. Estábamos invitados, nuestra Facultad de Ingeniería en el antiguo Campus de la UACH quedaba a espaldas de dicho teatro... “Al cual nos apuramos a llegar para alcanzar buen palco" y, conocer al doc Neri, estrechar la mano por primera vez de un astronauta y, que mejor, del primer mexicano en serlo. ¡Ciao Bambino!... lo despedíamos. Al recordar este pasaje de nuestra época universitaria con fondo musical de la repetida rola que, en su letra alude a nada más y nada menos a ¡Pancho Villa!...¿Pero que demonios hace este "muchachito"en la estupenda voz de la Mathieu, y en idioma francés? quien dice al traducirla...- " Te crees irresistible con tu bigote y botas vaqueras. crees que eres Pancho Villa... Ciao Bambino". Nos vino tambien a la mente el otrora Teatro de los Héroes (Incendiado en 1955) y que en noviembre de 1919 fue enjuiciado "bajo un ensayado guión" de antihéroes sumisos a Carranza, y cuyo veredicto final se adivina desde el principio. En su elocuente discurso de aclaración, Ángeles habla de las circunstancias que obligaron a Villa de hacer justicia... Que no se arrepiente de nada..."Por qué temerle a la muerte, sino le temo a la vida". Fue fusilado... ¡Ciao Bambino!...


A los cinco años de edad, Rodolfo, sus padres, y hermanos, se mudaban de Chilpancingo a la capital mexicana, era la segunda mitad de la década de los años cincuenta. A la mayoría de esos chicos al preguntarles de lo qué serían de grandes, la mayoría contestaba que, curas, bomberos o astronautas; hoy en día la respuesta escalofriante y, de moda es: Sicario... ¡Ciao Bambino!: (Canción con Mireille Mathew que hacíamos repetir seguidamente al estar armando esta historia y "despidiéndo muchachitos", aunque estuviera la letra de la rola en francés y su título en Italaino, llamaba poderosamente la atención una frase que, hacíamos lo posible para entender, adelante sabremos porqué...)

Rodolfo, recibiría en 1975 el título en ingeniería mecánica-eléctrica con especialidad en comunicaciones en la UNAM; estudió la maestría en sistemas de telecomunicación entre 1975 y 1976 en la Universidad de Essex, en el Reino Unido; obtuvo el grado de doctor en radiación electromagnética en la Universidad de Birmingham, Reino Unido, en 1979, y en esa misma institución realizó investigaciones post-doctorales en Guías de Ondas.

El sueño habría de cumplírsele, ¡Ciao Bambino!...Participó como especialista en la Misión del Transbordador Espacial Atlantis, llevando a cabo una serie de experimentos diseñados por científicos mexicanos. La misión despegó la noche del 26 de noviembre de 1985 desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida, y regresó a tierra en la Base Edwards de la Fuerza Aérea Estadounidense en California el 3 de diciembre. El objetivo principal era poner en órbita tres satélites de comunicación, entre ellos el Morelos II. El doctor Neri Vela participó, de 1989 a 1990, en el diseño de la Estación Espacial Alfa, de la Agencia Espacial Europea, y en los últimos años se ha desempeñado como profesor de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, impartiendo cursos de matemáticas, teoría electromagnética, circuitos eléctricos, análisis de señales, antenas y comunicación por satélite, información fruto de su trabajo en el Instituto de Investigación Eléctrica, en México, en el Grupo de Radiocomunicaciones. Ha trabajado también en el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de EUA y Reino Unido, en la Asociación Mexicana de Ingenieros en Comunicaciones y en el Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas. Durante el 2010 y 2011 colaboró en la creación de la Agencia Espacial Mexicana. Se dedica a la divulgación científica y a dar cátedra con respecto a la termodinámica y la ingeniería espacial.

En 1986, impartió una conferencia en el actual Teatro de los Héroes en la ciudad de Chihuahua. Estábamos invitados, nuestra Facultad de Ingeniería en el antiguo Campus de la UACH quedaba a espaldas de dicho teatro... “Al cual nos apuramos a llegar para alcanzar buen palco" y, conocer al doc Neri, estrechar la mano por primera vez de un astronauta y, que mejor, del primer mexicano en serlo. ¡Ciao Bambino!... lo despedíamos. Al recordar este pasaje de nuestra época universitaria con fondo musical de la repetida rola que, en su letra alude a nada más y nada menos a ¡Pancho Villa!...¿Pero que demonios hace este "muchachito"en la estupenda voz de la Mathieu, y en idioma francés? quien dice al traducirla...- " Te crees irresistible con tu bigote y botas vaqueras. crees que eres Pancho Villa... Ciao Bambino". Nos vino tambien a la mente el otrora Teatro de los Héroes (Incendiado en 1955) y que en noviembre de 1919 fue enjuiciado "bajo un ensayado guión" de antihéroes sumisos a Carranza, y cuyo veredicto final se adivina desde el principio. En su elocuente discurso de aclaración, Ángeles habla de las circunstancias que obligaron a Villa de hacer justicia... Que no se arrepiente de nada..."Por qué temerle a la muerte, sino le temo a la vida". Fue fusilado... ¡Ciao Bambino!...