/ lunes 27 de julio de 2020

Actividades Lucrativas, Respeto, Ambiciones

Por los tiempos de vida del ser humano, es decir de todos, la vida la empezamos a entender según esto al cumplir la mayoría de edad, pero se debe de agregar la educación de casa y de escuela, ya que es parte de lo que llevamos todos y cada uno, y se inculcaba que el esfuerzo era lo mejor para lo que se ganara con trabajo, fuera a futuro y administrarlo con prudencia y respeto a los vecinos , para decir lo que se hizo durante la vida, y es variado ya que muchos con suerte, otros con trabajo, mas con delitos se han hecho de riquezas y queremos ser reconocidos como señores, señoras, por decir un distintivo social, moral, que es parte de la vanidad natural del ser humano.

Han existido grandes capitales económicos, y muchos de procedencia oscura, otros de trabajo, y otros de las ganancias de la política, que es la más socorrida para tener fortuna, poder y reconocimiento según ese tipo de personas.

Muchos jóvenes se quieren hacer ricos de la noche a la mañana, tomando los bienes a su alcance y de otras personas, como síntoma de inteligencia, y valor, sin respetar a los viejos, y lo ridículo, como si ellos no se van a hacer viejos, porque mueven el mundo a momentos, no a consecuencias de los actos, y creen que hacerlo así , es lo mejor, y dejan los valores de casa fuera y es de fregar al que se atraviese, y en principios seria lo inteligente, lo malo es que el karma expreso, señala que lo que se hace se paga y es a fuerza, y se paga no solo en uno, también en la familia, y sin notar que la fama negativa provoca rechazos y venganzas en no pocas veces, pero sin pensar lo hacemos y lo gritamos con orgullo mal entendido.

Pero no solo se queman esos y esas, queman al gremio, el que sea, de empleados flojos y rateros, abogados gris rata, médicos muerteros, ingenieros quita varillas, y otras actividades, sin pensar que, aunque sea engaño contra engaño, la vida es un equilibrio forzado, ya que, de lo contrario, seria estar a la defensiva la vida, cuidándose de todos y de todo, vea incluso los que tiene guardias, que son de todo el tiempo, más por miedo que por valor, por lo que les pido que no quemen el gremio del que todos vivimos y me incluyo, porque el prestigio de la carrera la damos las personas, mujeres y hombres, y de cualquier otra preferencia, todos como iguales, profesionistas realizando una labor, en beneficio propio, y de la sociedad, según la ley de profesiones.

En este aspecto he escuchado de manera necia, de que uno es así y que a nadie le importa, lo que es equivocado, ya que vivimos en sociedad y requerimos del cliente, del pueblo, lo que parece estar olvidado por los ambiciosos desmedidos, ya sea de una profesión, trabajo, empresa, arte, que dejamos de lado el prestigio de excelencia y calidad, sombreado por y etiquetado con hambre de dinero y poder; como vender menos producto a mas precio, operaciones innecesarias, gastos desmedidos, material que se desvía, fraudes para quitar propiedades, creo no son inteligencia, ya que el efecto necesario, es el rechazo del pueblo a este tipo de gentes, y con justa razón, si los lastimamos, pues la reacción no se hace esperar.

También es sano pensar en nuestra salud profesional, personal, familiar, política, ya que no es propia, es de un gremio, y ni un presumido es toda la sociedad, ni el mejor de su ramo, es más, caemos mal, casi nos vomitan, aunque finjamos tontejés.

Espero le atine a la verdad, sin ser tiro al blanco, pero ya se empiezan a ver destrucciones de personas que actúan en excesos y cinismos.

Por los tiempos de vida del ser humano, es decir de todos, la vida la empezamos a entender según esto al cumplir la mayoría de edad, pero se debe de agregar la educación de casa y de escuela, ya que es parte de lo que llevamos todos y cada uno, y se inculcaba que el esfuerzo era lo mejor para lo que se ganara con trabajo, fuera a futuro y administrarlo con prudencia y respeto a los vecinos , para decir lo que se hizo durante la vida, y es variado ya que muchos con suerte, otros con trabajo, mas con delitos se han hecho de riquezas y queremos ser reconocidos como señores, señoras, por decir un distintivo social, moral, que es parte de la vanidad natural del ser humano.

Han existido grandes capitales económicos, y muchos de procedencia oscura, otros de trabajo, y otros de las ganancias de la política, que es la más socorrida para tener fortuna, poder y reconocimiento según ese tipo de personas.

Muchos jóvenes se quieren hacer ricos de la noche a la mañana, tomando los bienes a su alcance y de otras personas, como síntoma de inteligencia, y valor, sin respetar a los viejos, y lo ridículo, como si ellos no se van a hacer viejos, porque mueven el mundo a momentos, no a consecuencias de los actos, y creen que hacerlo así , es lo mejor, y dejan los valores de casa fuera y es de fregar al que se atraviese, y en principios seria lo inteligente, lo malo es que el karma expreso, señala que lo que se hace se paga y es a fuerza, y se paga no solo en uno, también en la familia, y sin notar que la fama negativa provoca rechazos y venganzas en no pocas veces, pero sin pensar lo hacemos y lo gritamos con orgullo mal entendido.

Pero no solo se queman esos y esas, queman al gremio, el que sea, de empleados flojos y rateros, abogados gris rata, médicos muerteros, ingenieros quita varillas, y otras actividades, sin pensar que, aunque sea engaño contra engaño, la vida es un equilibrio forzado, ya que, de lo contrario, seria estar a la defensiva la vida, cuidándose de todos y de todo, vea incluso los que tiene guardias, que son de todo el tiempo, más por miedo que por valor, por lo que les pido que no quemen el gremio del que todos vivimos y me incluyo, porque el prestigio de la carrera la damos las personas, mujeres y hombres, y de cualquier otra preferencia, todos como iguales, profesionistas realizando una labor, en beneficio propio, y de la sociedad, según la ley de profesiones.

En este aspecto he escuchado de manera necia, de que uno es así y que a nadie le importa, lo que es equivocado, ya que vivimos en sociedad y requerimos del cliente, del pueblo, lo que parece estar olvidado por los ambiciosos desmedidos, ya sea de una profesión, trabajo, empresa, arte, que dejamos de lado el prestigio de excelencia y calidad, sombreado por y etiquetado con hambre de dinero y poder; como vender menos producto a mas precio, operaciones innecesarias, gastos desmedidos, material que se desvía, fraudes para quitar propiedades, creo no son inteligencia, ya que el efecto necesario, es el rechazo del pueblo a este tipo de gentes, y con justa razón, si los lastimamos, pues la reacción no se hace esperar.

También es sano pensar en nuestra salud profesional, personal, familiar, política, ya que no es propia, es de un gremio, y ni un presumido es toda la sociedad, ni el mejor de su ramo, es más, caemos mal, casi nos vomitan, aunque finjamos tontejés.

Espero le atine a la verdad, sin ser tiro al blanco, pero ya se empiezan a ver destrucciones de personas que actúan en excesos y cinismos.