Se me hace interesante no solo para salvar la vida, también como experiencia de vida y necesidad social de cuidarnos, porque los contagios arrasan con ricos y pobres, buenos y malos, y los demás que sobramos, pero regresando al tema, me puse a admirar como actuamos los seres humanos, unos enojados, otros escamados, ariscos, sin cuidado, y lo chistoso, todos juntos, aunque presumamos de individualidad, lo que me dio risa las actitudes que a veces tomo de creerme especial, y ser solo de la raza popular, lo que no me incomoda, en fin como ser gregario y humano, necesitamos de la vida en sociedad.
La manera más o menos ordenada al acudir me dio satisfacción, y conscientes del riesgo mortal del coronavirus, fue más fuerte que las vanidades, pero buscando protección a la vida.
Mas esta experiencia me dio motivos para creer en el género humano, aun con todas las agravantes y como diría Jesús, ¡PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN!, ¡HACEMOS!, más actual, y ver la necesidad de cooperación y agilizar todo, lo que es lo mejor, y platicando con muchas personas, me agrado el número de valores que ni siquiera preguntamos, y fueron menos las críticas que los comentarios favorables, llegando a la conclusión que nos falta información real de lo que sucede en la sociedad, las personas que viven del gobierno y nosotros mismos.
Este parámetro es muy importante, si sabe guiar a un pueblo, pero por un verdadero líder, no un muerto de hambre de poder, sería mejor para todos, y no escudarse en el gobierno o la letra de la ley, cosa astuta y mañosa, mezclada por lo mortal, y apreciar la falta de liderazgo en la sociedad, y a las pruebas me remito, muchos ocupan puestos, pero esas personas son altamente rechazables o evitables, llegan solo a perjudicar, no para ayudar.
Las actitudes de muchos médicos, enfermeras, enfermeros, guardia nacional, le dio un aire de seriedad muy interesante y se me antoja que se repita en muchas actividades sociales de cuidado sanitario y en catástrofes, es de alta educación, aparte de humanitario, que acá entre nos, nos conviene a todos y todas.
Sin dejar de lado al personal del Tecnológico de Parral, que mis respetos, actuaron a la altura y responsablemente, con respetos, pero sinceros, hasta algunos contentos, contagiando esto, regalándolo, valioso.
Entiendo con la vacuna mi fragilidad como ser humano, mi conexidad con la sociedad en la que vivo, espero la gente entendamos la experiencia y el mensaje de vida, sino, pues los que sobrevivan o sobrevivamos, lo apreciemos mejor.
Maestro en derecho penal
